Bajo un operativo de seguridad sin precedentes que transformó a la Ciudad Eterna en una verdadera fortaleza, más de 250.000 fieles se congregan este domingo en los alrededores del Vaticano para presenciar la ceremonia de inicio del pontificado de León XIV. El acto central está previsto para las 10:00 (15:00 en Argentina) en la Plaza de San Pedro y marcará el comienzo del ministerio petrino del 267º sucesor de San Pedro, con la participación de más de 150 delegaciones oficiales de todo el mundo. Roma enfrenta una jornada de altísima exigencia logística: los hoteles están colmados y el arribo constante de peregrinos por aire y tren mantiene en vilo a la ciudad. Las autoridades establecieron un riguroso perímetro de seguridad alrededor del Vaticano, con controles reforzados y acceso restringido. Entre los líderes internacionales presentes destacan los reyes Felipe VI de España, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. La ceremonia seguirá el rito milenario de la Iglesia Católica. Antes de la misa, el nuevo pontífice recorrerá la plaza en el papamóvil para saludar a los fieles. Luego descenderá a las grutas vaticanas para rendir homenaje en la tumba de San Pedro. Durante la liturgia, recibirá las insignias papales (el palio, el Anillo del Pescador y el Libro de los Evangelios), símbolos del inicio formal de su papado y de la continuidad apostólica que remonta a los orígenes del cristianismo. El momento más esperado será la primera homilía de León XIV como Sumo Pontífice, que pronunciará desde el balcón central de la Basílica de San Pedro. La ceremonia será transmitida en todo el mundo y se espera que las palabras del nuevo Papa marquen el tono de su pontificado, en un contexto de profundos desafíos para la Iglesia en el siglo XXI. La jornada concluirá con el rezo del Regina Caeli y la bendición apostólica. Luego, el Papa saludará personalmente a las delegaciones oficiales, cerrando así un proceso que comenzó con el reciente cónclave y abriendo una nueva etapa para los más de 1.300 millones de católicos en todo el mundo.