Platense escribió una página dorada de su historia este domingo al consagrarse campeón en el norte argentino. En una final intensa y cargada de emoción, el equipo dirigido por [nombre del DT, si se quiere agregar] venció por 1-0 gracias a un verdadero golazo de Guido Mainero, que desató la locura de los hinchas del Calamar y selló la tan ansiada vuelta olímpica en el estadio Único Madre de Ciudades. El tanto llegó en el segundo tiempo, tras una jugada colectiva que culminó con un remate certero del volante, imposible para el arquero rival. El gol no solo definió el partido, sino que también coronó el buen rendimiento del conjunto de Vicente López a lo largo del torneo. Con este triunfo, Platense suma un nuevo título a su historia y celebra un presente que lo ilusiona con seguir creciendo. La entrega del equipo, el respaldo de su gente y el liderazgo en momentos clave fueron determinantes para alcanzar la gloria. Tras el pitazo final, jugadores, cuerpo técnico e hinchas festejaron en el campo de juego con cánticos, banderas y emoción. La imagen del equipo levantando el trofeo frente a una tribuna colmada quedará grabada en la memoria calamar. Este título representa mucho más que un campeonato: es una muestra de carácter, trabajo y compromiso en un fútbol argentino cada vez más competitivo.