Luego de un Torneo Apertura complicado, en el que los resultados negativos dejaron al equipo en zona de descenso y las críticas por el estado del campo de juego se multiplicaron, San Martín de San Juan inició una renovación integral del césped del estadio Hilario Sánchez. La decisión fue impulsada por el propio entrenador Leandro Romagnoli y varios jugadores, quienes expresaron públicamente su descontento con las condiciones del terreno. Ante esta situación, la dirigencia respondió con una serie de mejoras estructurales. Actualmente, el campo atraviesa una etapa clave del proceso: fue resembrado por completo y se llevó a cabo el reemplazo total del sistema de riego por aspersión, algo que no se actualizaba desde hace más de una década. Según comunicó el club en sus redes, el césped permanece cubierto con mantas térmicas protectoras, una medida destinada a protegerlo del frío sanjuanino y asegurar un desarrollo uniforme y saludable. De no haber demoras, el club prevé que el campo esté listo para el 18 de julio, cuando San Martín reciba a Deportivo Riestra en su debut como local en el Torneo Clausura. La inversión también se extendió al predio Emmanuel Mas, donde entrenan las divisiones inferiores, que fue resembrado siguiendo los mismos parámetros técnicos que el estadio principal. Cabe señalar que tras el ascenso a Primera División, la institución priorizó otros frentes institucionales, postergando intervenciones sobre el campo de juego. Esta situación llevó a un deterioro visible, que ahora se busca revertir con una apuesta fuerte a la infraestructura. La expectativa es que, con el inicio del nuevo torneo, el césped vuelva a destacarse por su calidad, como sucedió en temporadas anteriores.