Domingo 06.07.2025
Actualizado hace 10min.

Milei redobla la apuesta contra los gobernadores y sostiene que “la plata les alcanza”

En los lineamientos para el Presupuesto 2026, el Ejecutivo reconoció que, aunque se destine menos dinero a las provincias, será suficiente para cubrir sus gastos.

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La confrontación del Gobierno con las provincias sigue siendo constante, sin dejar espacio para acuerdos. El foco más reciente es el proyecto de Ley de Presupuesto 2026, que debe ser presentado al Congreso a finales de junio.

En el proyecto de Ley de Presupuesto 2026, el presidente Javier Milei lanzó un nuevo mensaje a los gobernadores, que habían anticipado la presentación de un proyecto para quedarse con cerca de $1 billón: “La plata que tienen este año les alcanza”, les advirtió.

El mensaje, transmitido en términos técnicos, señala que “el Resultado Económico (de las provincias) mostraría una mejora nominal de 28,8% respecto al ejercicio 2024, lo que aseguraría que las provincias podrían afrontar sin inconvenientes sus gastos operativos y de funcionamiento”.

Es importante aclarar que ese incremento “nominal” no está ajustado por inflación, por lo que en términos reales esa mejora se traduce en una caída.

La advertencia aparece en la página 42 del informe oficial, en un apartado dedicado a la relación entre el Poder Ejecutivo y las provincias. Aunque estos documentos se preparan con meses de antelación, la creciente tensión entre la Casa Rosada y los gobernadores se reflejó claramente en el texto, aprovechando para enviar un mensaje firme.

Con datos al primer trimestre, Economía proyectó que el Resultado Financiero provincial (resultado primario menos pago de deuda) será “levemente deficitario” en 2025, aunque sin ser significativo en relación al PIB. El Resultado Primario, en tanto, se espera positivo y equivalente al 0,2% del PIB. Esto responde a que los ingresos totales crecerían un 41,6%, mientras que los gastos primarios aumentarían un poco más, un 43,6%.

Para reforzar su postura, Milei dejó claro que continuará con el ajuste: las Transferencias de Capital (fondos destinados a inversión pública, como infraestructura) subirán solo un 27,5% respecto a 2024, lo que representa una fuerte caída en términos reales.

Mientras tanto, los gobernadores están dispuestos a avanzar con la sanción de ambas leyes y han amenazado con incluir el debate en la sesión del próximo jueves. Sin embargo, algunas voces advierten que la iniciativa podría enfrentar obstáculos legales, dado que la cámara de origen fue el Senado, mientras que al tratarse de modificaciones impositivas, debió haberse presentado en Diputados.

Presupuesto “base cero”

En otro punto, Milei ratificó su intención de armar un presupuesto basado en los recursos disponibles, en lugar de primero plantear gastos y luego buscar financiamiento.

El documento anticipa que las áreas de Gobierno están trabajando en sus previsiones con el fin de “mejorar la asignación estratégica de los recursos, que servirá para establecer límites o ‘techos presupuestarios’, en línea con las metas fiscales del Gobierno nacional y limitados por la recaudación global”.

Este enfoque había sido motivo de debate en el proyecto de Presupuesto 2025, que finalmente no fue aprobado.

Actualmente, el Poder Ejecutivo está operando con una prórroga del Presupuesto de 2023, lo que obliga a realizar actualizaciones casi mensuales para ajustar las partidas a la realidad económica y financiera del país.

El proyecto final del Presupuesto 2026 debe presentarse antes del 15 de septiembre, pero este año la situación es particular debido a las elecciones de medio término y al próximo cambio en la conformación del Congreso nacional.

Por ello, resulta incierto cuál será la estrategia del Gobierno. Si se respetan los plazos, el proyecto deberá comenzar su tratamiento parlamentario con la actual composición del Congreso, donde, por experiencias anteriores, podría enfrentar una fuerte resistencia.

De esta manera, es probable que la discusión quede congelada hasta diciembre, cuando cambien las fuerzas políticas y las alianzas. Sin embargo, esto no garantiza un tratamiento ágil ni en tiempo y forma, lo que podría derivar en la necesidad de convocar sesiones extraordinarias en febrero o directamente después de la apertura de sesiones del 1° de marzo.