Nadie se quiere quedar afuera de la Superfinal de La Libertadores entre Boca y River. Tanto es así que un efectivo de la Policía de la Ciudad que no estaba abocado a la seguridad del partido entró vestido con el uniforme de la fuerza, al igual que familiares y amigos, con el objetivo de evadir los controles de acceso. Sin embargo, un comisario se dio cuenta de la maniobra y fue descubierto. Fuentes policiales informaron que el hecho ocurrió el sábado, antes de que se determine la suspensión del encuentro, cuando el agente, quien presta servicio en la División Subtes Líneas A y B de la fuerza porteña, entraba a la cancha con otras cinco personas. En ese momento, Personal de la División Investigaciones de Conductas Delictivas en Espectáculos Públicos de la policía de la Ciudad, entre ellos un comisario, detectó al efectivo, que era seguido por cinco personas que vestían distintas prendas policiales (sin identificación de grado ni apellido). Al interrogar a dichos supuestos policías, uno de ellos se identificó como efectivo de la Policía de la Ciudad (ya que no poseía gafete ni grado) y confesó que el resto de las personas que lo acompañaban eran familiares y amigos, a los cuales les había prestado las prendas policiales con el solo fin de evadir los controles para entrar a la cancha. Fuentes consultadas por Noticias Argentinas precisaron que el uniformado y los falsos efectivos serán castigados con uno a cinco días de trabajo de utilidad pública o una multa de hasta 200 mil pesos. Asimismo, el agente será sancionado por la propia Policía de la Ciudad ante la infracción. FUENTE: TN