El fiscal Alberto Nisman, quien investigó el atentado a la mutual judía AMIA de 1994 y acusó a la expresidenta Cristina Kirchner de encubrir a iraníes, apareció muerto hace cinco años.  Nisman tenía 51 años el 18 de enero de 2015 cuando apareció muerto de un tiro en la cabeza en su departamento de Puerto Madero. Puedes leer: Caso Nisman: Lagomarsino una pista de la investigación Una convocatoria por redes sociales, a la que se sumaron dirigentes de la alianza opositora Cambiemos, llamó a concentrarse este sábado por Nisman en Buenos Aires, en un acto que se espera de fuerte tono opositor al gobierno de Alberto Fernández, cuya vicepresidenta es Cristina Kirchner. Este homenaje, con mayoría de líderes del macrismo, se desarrollará en la Plaza Vaticano, junto al Teatro Colón. Desde el 2015 la figura del fiscal es un símbolo de la grieta que divide a los argentinos entre quienes sostienen que se suicidó y quienes afirman que fue asesinado. Este año, la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) y la familia de Nisman optaron por una ceremonia el domingo en el cementerio judío de La Tablada, donde está enterrado el fiscal. Los grandes ausentes en ambos actos serán la exesposa de Nisman, la jueza Sandra Arroyo Salgado, y sus hijas, Lara y Kala, que no están en el país. Además de los actos en La Tablada y la Plaza del Vaticano, habrá marchas en diferentes ciudades del interior del país y en los Estados Unidos.