Fue a la cárcel a ver a su marido condenado y estaba con la amante: la atacó a la salida

La escena ocurrió el fin de semana último en el horario de visitas de la Unidad Penal N°9 de La Plata.

Dos mujeres la protagonizaron. Ambas habían llegado allí para visitar a un detenido. Pero una de ellas no pudo verlo, ya que las autoridades le informaron que, en ese momento, el preso, su marido, se encontraba en una visita íntima con... Bueno, la otra visitante.

Así, la esposa del detenido en ese penal de La Plata se fue hasta la vereda, junto a todas las otras mujeres que esperaban para visitar a sus parejas y familiares.

“Ja, ja, pero si ya te lo re vueltié”, le replicó la visita íntima al salir. El reproche, desafiante, aumentó la tensión. “Te garchó y te pasó a otro plano. Yo llorando y vos garchando con mi marido, pedazo de otaria. Te dejaste endulzar por un preso, boluda”, le lanzó la esposa del reo. Otra mujer en el decorado apuntó: “Te hizo traer todas las porquerías”, en referencia al bagayo de pertenencias y comestibles que las mujeres de los detenidos suelen llevarles.

“Ya lo llamaste al otro gil, ¿no atiende el guampudo?”, preguntó una allí. “¿Sabés lo que es querer entrar y no poder porque esta hija de puta estaba cogiendo con mi marido?”, replicó la esposa del detenido.

“Matala”, lanzó otro. Poco antes, la esposa le había robado el teléfono celular a la amante de su marido. “No te rompí la cara porque Dios es grande... Si te querés ir, andate”, siguió en un aparente gesto de piedad. Luego, otra mujer apareció en la escena y comenzó la golpiza, hasta que la situación fue desarticulada, mientras otros presentes alentaban para que el ataque continúe en una zanja cercana.

Filmada por celulares, la secuencia se volvió viral, difundida por el sitio La Buena Info. Sin embargo, restaba saber quién era el hombre en cuestión.

Infobae pudo determinar su identidad mediante fuentes judiciales ante repetidas negativas a consultas realizadas al SPB: el detenido en cuestión es Marcos Sebastián Del Grosso, 39 años, oriundo de la zona de Circunvalación. Se encuentra condenado, con una pena que se considerará cumplida en 2033. El delito: abuso sexual gravemente ultrajante, con una pena dictada por el Tribunal Oral Criminal N°4 y supervisada por el Juzgado de Ejecución Penal N°1.

El agravante en la calificación es notable. La Ley argentina establece que los casos gravemente ultrajantes ocurren cuando se suma a la situación de abuso un exceso que afecta aún más la dignidad de la víctima, donde la humilla y la degrada.