Mientras continúa la conmoción por el asesinado de Umma, la niña de 9 años que murió en Lomas de Zamora durante un asalto a sus padres, el Gobierno anticipó que ya tiene terminado un proyecto de ley para aumentar las penas para “crímenes aberrantes” y que, además, modifica la figura de la reincidencia por la de reiterancia. La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, advirtió que buscarán que se aplique “la máxima condena” para los asesinos de la hija de uno de sus custodios, aunque aclaró que todo “dentro de la ley”, en respuesta a una consulta sobre algunas expresiones de representantes de La Libertad Avanza que insinuaban medidas más drásticas para con los delincuentes. “Las expresiones oficiales del Gobierno son, en el marco de la ley, la máxima condena. Vamos a trabajar sobre el Código penal para que los crímenes aberrantes de todo tipo tengan condenas más altas, para que los que roban, matan, violan, destruyen familias tengan penas más altas. Pero no vamos a ser parte de la ley de la selva, somos el Estado que tiene que tratar de regular las conductas a partir de sus códigos. No vamos a pasar ese límite”, dijo la ministra en diálogo con la periodista María O’Donell en Urbana Play. Más tarde, durante una mini rueda de prensa a la salida de su domicilio, Bullrich dio más detalles sobre la iniciativa que el Gobierno enviará al Congreso para modificar el Córdigo penal. “Vamos a presentar un proyecto para cambiar lo que es la reincidencia por la reiterancia. La hace una vez, la hace la segunda, adentro. Basta de estar con condenas que duran 6 años y durante esos 6 años siguen cometiendo delitos. Esto se termina. Este proyecto está terminado, y ni bien tengamos un respiro parlamentario, queremos mandar inmediatamente este proyecto. Basta de estar del lado de los delincuentes. Es absolutamente necesario que haya un cambio que sea a favor de las víctimas y en contra de los asesinos y de los criminales”, afirmó. Umma, de 9 años, era la hija del medio de Eduardo Aguilera, integrante de la Policía Federal y custodio de la ministra Bullrich, y de María Eugenia Rodríguez Álvarez, también interante de la fuerza federal. Falleció en la tarde del lunes horas después de recibir un disparo en su cabeza mientras un grupo de delincuentes intentaban robar el auto en el que viajaba junto a sus padres. El primer detenido por el crimen de Umma está alojado en la comisaría 7ª de Lomas de Zamora. Hacia allí fue el fiscal del caso Pablo Rossi, de la UFI N°18 de Lomas de Zamora, mientras se realizaban allanamientos para dar con el resto de la banda. “Es un hecho tremendo”, dijo el funcionario judicial esta noche. Luego, Rossi confirmó a la prensa: “Hay un aprehendido. Hay evidencias suficientes inicialmente para entender que ha tenido participación en el hecho”. Y agregó: “Nuestra prioridad es encontrar a los autores del hecho... Tenemos muchas filmaciones y la investigación se basa en que hay cuatro personas que se distribuyeron las tareas, los cuatro han sido coautores”.     Los videos de la cuadra de Villa Centenario donde ocurrió el ataque permitió obtener las imágenes de los dos sospechosos que se bajaron del Toyota Corolla para asaltar al custodio de Bullrich y que, en ese contexto, balearon a la nena: uno lleva remera negra y bermudas de jean y el otro, camisola blanca y gorra. Con esas descripciones y revisando las cámaras dieron con ellos ocho minutos antes del ataque, a tan solo 10 cuadras de donde balearon a Umma: iban junto a otros dos sospechosos, que ahora se investiga si también estaban a bordo del Toyota Corolla negro. Esos cuatro sospechosos habían robado el coche en el que se movilizaban tres minutos antes del crimen de la nena. Bullrich aseguró hoy que, “se está atrás de los asesinos y esa es la tarea más importante ahora para que haya justicia”, y dijo que, por el momento, tiene información de una sola persona detenida. Además, aclaró que no manejan ninguna otra hipótesis que no sea la de un asalto “al voleo”, descartando que el ataque pueda tener que ver con la tarea que el padre de Umma realiza en su custodia oficial. Bullrich también destacó que mantiene un diálogo permanente con las autoridades de la provincia de Buenos Aires, y que tienen “una relación muy buena”, a diferencia de lo que ocurrió en los últimos años cuando el entonces ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, mantuvo un vínculo tirante con su par de Nación, Aníbal Fernández. “Estamos rearmando una forma de trabajo porque la provincia de Buenos Aires nos ha planteado que la forma en que se estaba trabajando no les gustaba. Era sumar efectivos de las fuerzas federales a los efectivos que tiene la provincia. Quieren una tarea más de investigación, estamos en pleno cambio de paradigma. Tenemos una colaboración, y en este caso, inmediatamente, la provincia de Buenos Aires trabajó con la Policía Federal”, dijo Bullrich.