El presidente Javier Milei concretará esta noche el veto total al proyecto de ley aprobado recientemente por el Congreso Nacional que establecía un incremento de haberes para jubilados y pensionados. Se tomó casi una semana para concretarlo. Y antes convocó a la Casa Rosada a un grupo de legisladores del oficialismo y de los bloques más cercanos al oficialismo como algunos diputados del PRO y del MID. En la reunión, que duró poco más de una hora, confluyeron diputados de su partido, La Libertad Avanza, que tiene 35 representantes en la Cámara baja y también varios integrantes del PRO. El Presidente, en el Salón de los Científicos del primer piso de la Casa Rosada, estuvo acompañado por Karina Milei, su jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y por el secretario de Interior, Lisandro Catalán. El tema central fue la reforma jubilatoria que aprobó el Congreso y las consecuencias económicas para el Gobierno si Milei no la veta en su totalidad. El PRO manifestó su respaldo a esta decisión y adelantó que también tiene el apoyo de los gobernadores de Juntos por el Cambio. Entre los temas que se le plantearon desde el partido que preside Mauricio Macri está la necesidad de acordar y trabajar juntos para que este tipo de iniciativas no prosperen en el Congreso. “Sesiones como estas, debilitan al gobierno ya que no poseen las mayorías parlamentarias, la oposición termina poniendo sesiones cuando quieren y sacando las leyes que ellos quieren”, le dijeron al líder libertario. “Para que esto no ocurra tenemos que trabajar en equipo, no solo entre nosotros sino que buscar otros diputados y sumarlos, a que sean aliados nuestros. Tenemos que incorporar a este trabajo en equipo a los gobernadores del PRO, a los intendentes de PRO y empezar a trabajar en una construcción política conjunta para que el kirchnerismo no vuelva nunca más”, agregó uno de los participantes, según pudo reconstruir Infobae. Quien no estuvo presente fue el riojano Martín Menem, presidente de la Cámara de Diputados, y a quien desde las cercanías del Presidente apuntan como uno de los responsables de los recientes resultados adversos en la Cámara Baja. Aunque casi todos los viernes se lo ve en la Rosada, adonde concurre a conversar con su primo Eduardo “Lule” Menem, subsecretario de Gestión Institucional de la Secretaría general de la Presidencia que encabeza Karina Milei, esta vez no participó. Desde su entorno dejaron trascender que su ausencia se debió “a un viaje programado con anterioridad” a la convocatoria presidencial. Propuesta de una mesa de trabajo legislativo Aunque la posibilidad de unirse en un solo bloque todavía aparece como muy lejana desde el sector de Ritondo manifestaron que el trabajo legislativo de cara al futuro “estaría bueno materializarlo en una mesa de trabajo donde las cabezas nos reunamos periódicamente y podamos trabajar en este sentido”, apuntando a una estrategia consensuada. “Necesitamos que antes de tomar cualquier decisión que requiera la intervención o ayuda de nuestro bloque podamos debatirla antes juntos”, insistieron. A la salida, Cristian Ritondo habló con la prensa y ratificó esta postura: “Cuando uno tiene déficit fiscal o imprime o se endeuda. Con la presencia nuestra no van a llegar a los dos tercios”, dijo sobre la sesión que buscará anular el veto presidencial. Por LLA estuvieron Gabriel Bornoroni, Nadia Márquez, José Peluc, Pablo Ansaloni, Nicolás Mayoraz, José Luis Espert (fue el primero en llegar a la Casa de Gobierno), Lisandro Almirón, César Treffinger, “Bertie” Benegas Lynch. Y por el PRO, además de Ritondo, María Eugenia Vidal, Luciano Laspina, Silvana Giudici, Diego Santilli y Alejandro Bongiovanni. También lo hace Oscar Zago (MID), quien en la Cámara baja tiene un minibloque junto a otros dos legisladores, luego de que lo desplazaran de la conducción del bloque en abril. De los senadores, los tres pertenecen al oficialismo que luego de la expulsión del bloque de Francisco Paoltroni, quedó reducido a seis parlamentarios. En la reunión participaron el puntano Bartolomé Abdala y los jujeños Ezequiel Atauche y Vilma Bedia. El contexto parlamentario preocupa a Milei que en pocos días sufrió varios reveses. Primero con la designación de Martín Lousteau al frente de la Comisión Bicameral de Inteligencia tras un acuerdo con el kirchnerismo, más tarde con el rechazo a los fondos reservados a la SIDE y finalmente con la ley que actualiza las jubilaciones y que según las estimaciones del Gobierno pone en serios aprietos al plan económico trazado. Desde el PRO, lo que le señalaron en esta ocasión a modo de reproche al oficialismo fue “que si nos hubieran escuchado cuando decíamos que la Bicameral de inteligencia debía conformarse, como lo veníamos pidiendo desde hace varios meses, porque considerábamos que ese era el ámbito correcto donde se debía tratar el DNU, si nos hubieran escuchado, no hubiéramos pasado por una sesión como la del miércoles pasado porque hubiéramos desactivado la bomba”. La posibilidad del encuentro surgió luego de la conversación que mantuvieron Milei y Macri en la Quinta de Olivos para seguir limando asperezas y para establecer una estrategia legislativa con elementos en común. No están legisladores de otras fuerzas que suelen acompañar algunas de las iniciativas del oficialismo como Miguel Ángel Pichetto, titular del bloque Encuentro Federal, ni Juan Manuel López (Coalición Federal) ni Rodrigo De Loredo (Unión Cívica Radical).