Con el correr de las horas van trascendiendo más detalles del caso que tiene detenido al reconocido cirujano plástico sanjuanino, Fabián Peláez, luego que su novia se arrojara por un balcón en Palermo, denunciando ser drogada y prostituida. En el canal América, se reveló parte de la primera declaración de la joven que debió ser intervenida por la fractura de sus dos tobillos. De acuerdo a lo expuesto, la mujer reconoció el consumo de drogas y un episodio paranoide. “Salté a la vereda y me arrastré por la calle. Creo que me comí una película, creo que estoy loca. Empecé a tener una situación de paranoia, pienso que se me corta el efecto de una droga entonces soy capaz de analizar y darme cuenta de que el me está utilizando, que hay una red de trata de personas”, dijo en un estado de “excitación y un discurso acelerado y verborrágico”, según describieron los profesionales que la asistieron. En otro tramo de su declaración se refiere la relación de pareja con Peláez como “vínculo perfecto, con peleas normales”. Un detalle resaltado por los psicólogos que la atendieron, es que la mujer intercalaba en su relato situaciones vivenciales con su ex novio (un odontólogo de 48 años) y las mezcla con su pareja actual. En ese contexto, afirmó que su expareja la obligaba a prostituirse. “Manejan la misma forma, por eso creo que son socios y después parezco una loca porque creo se conocen. Soy una persona intuitiva Se manejan de la misma forma los dos, se ponen en víctima, son unos psicótaptas manipuladores. Creo que ambos me drogaban para que no me diera cuenta de que manejan mujeres. No sé si me hago alta película”, manifestó la sanjuanina. Además, reconoció que desde el miércoles (5 días antes del incidente) estaban consumiendo cocaína, tusi y marihuana.  La mujer contó también que el día que decidió arrojarse del balcón del primer piso, ella increpó al cirujano. “Le dije que me estaba drogando, que me daba cuenta que me hacia trabajar. Me dijo que no, me cierra la puerta y me quita el celular. Si quería moverme, no me dejaba, se acostaba al lado mío y me sujetada, sentía pinchazos en la espalda”, relató. “Yo salté porque me tenía agarrada en la cama y no me dejaba levantarme. Lo saqué y me fui a tirar. Yo viví un flash de que yo no quería ser prostituta”, sumó.