Un grupo criminal que operaba en Buenos Aires bajo el falso pretexto de "cazar pedófilos" fue desarticulado por la Justicia tras una investigación que se extendió durante varios meses. La banda, liderada por Brandon Joaquín Maldonado, de 29 años, utilizaba perfiles falsos en redes sociales para atraer a sus víctimas. Una vez captados, los sometían a brutales sesiones de tortura que eran transmitidas en vivo para una audiencia online. La organización, estaba compuesta por cuatro hombres (entre 17 y 29 años) y una mujer de 21, operaba bajo una metodología escalofriante:  La joven del grupo, autodenominada "La carnada", se contactaba con los hombres adultos en aplicaciones de citas, dejaba en claro que era una mujer mayor aunque regularmente insertaba mensajes como "tengo 13" para crear falsas evidencias. Luego, en el secuestro, las víctimas eran llevadas a departamentos temporarios donde el grupo las sometía a vejaciones extremas (desde ingesta forzada de excremento hasta golpizas con varios objetos contundentes). Finalente, la transmisión del horror: los ataques se transmitían en vivo por diferentes plataformas como Kick, donde simultáneamente difundían datos personales de las víctimas para terminar destruyendo su reputación. La investigación se inició a partir de la denuncia de un hombre de 40 años, quien en marzo de 2025 fue víctima de una brutal sesión de tortura que se extendió por más de dos horas y media. Durante el ataque, los agresores utilizaron fragmentos editados de sus conversaciones para justificar la violencia ante la audiencia que seguía la transmisión en vivo. La Brigada de Investigaciones de la Comuna 5 logró identificar a los integrantes de la banda luego de rastrear una camioneta que había sido utilizada en varios de los crímenes. El operativo final se concretó el 2 de abril, cuando los sospechosos fueron capturados en pleno desarrollo de otra transmisión criminal. El Juzgado Nacional de Menores N.º 1 sigue con la investigación y busca identificar a más víctimas para poder ampliar la causa. Además, se analiza la posible existencia de otras bandas que se encuentran operando con una metodología similar. Las autoridades judiciales aconsejaron a cualquier persona que haya sufrido ataques de esta índole a que se presente ante la Justicia, asegurando la absoluta reserva de identidad.